Ana Lucía Ruiz Bermúdez / La Comiteca
Rodeado de pinos, cipreses y algunos
cultivos de maíz, se encuentran las misteriosas cavidades naturales que nos
llevan al mundo subterráneo de las Grutas de Arcotón, palabra que resulta de la
mezcla de una palabra en español (arco) y otra en tojolabal (ton, piedra): arco
de piedra.
La ubicación es más probable encontrarla
en internet como ejido Artículo 27, que es el ejido que se encuentra al lado,
pero Arcotón pertenece al ejido de Santa Rosa, a 18 kilómetros de su municipio
Las Margaritas, Chiapas y a 35 kilómetros desde Comitán de Domínguez.
Sin lugar a dudas, estas grutas te
harán sentirte en la época de la caverna. Se trata de una serie de grutas y
cavernas naturales, que posiblemente fueron creadas por el agua que un día
cruzó la zona subterránea, los pobladores dicen que tienen una longitud mayor a
3 hectáreas.
Sin
embargo las grutas no han sido debidamente exploradas, por lo tanto, no se sabe
a ciencia cierta dónde termina una gruta y dónde se comunica con otra.
Los visitantes pueden acceder a tres
de las grutas (no tienen un nombre que las diferencie). Las demás cavidades son
accesibles únicamente para espeleólogos con el equipo adecuado.
Las grutas de Arcotón son una
excelente opción para quienes estén por la región y deseen entrar en contacto
con la naturaleza y el mundo subterráneo, en un lugar alternativo al turismo.
Las entradas a las grutas principales
han sido ampliadas y cómodamente escalonadas para el fácil acceso de las
personas, que incluso el poeta comiteco Oscar Bonifaz, con sus más de 90 años
pudo descender.
Cada
gruta a la que se puede acceder cuenta con diferentes galerías y salones de
formas cóncavas, unos más amplios y otros más estrechos. Lo que más me impresionó
es que hay tantas entradas entre las paredes e incluso en los techos, que parecen laberintos.
El primer salón de cada gruta suele
ser más amplio, y es el único que cuenta con pasillo y barandal.
Al
entrar, da la sensación de estar accesando, en descenso y entre arcos, a un
lugar insólito y sobrenatural, o a la boca de una terrible bestia en donde los
colmillos son los cientos de estalactitas que sobresalen de los techos en todos
los tamaños. Y la temperatura en el interior del lugar se torna fresca por la
ausencia de la luz natural.
También
llegamos al fondo de la primera caverna, a una galería amplia con luz natural
que venía de una bóveda en la parte alta de la cueva desde donde se podía
escuchar el canto de las golondrinas. Las demás salas están iluminadas con
electricidad con la ayuda de cables que parecen dañar los muros de las grutas.
Aquí no hay niños que nos canten las
formas de las rocas, como en Rancho Nuevo o en Coconá, Tabasco, pero los guías
de ese día nos acompañaron por todo el recorrido para mostrarnos los pasajes
más interesantes entre los que destacan unas interesantes y magnificas
formaciones.
La
figura que más me impresionó es la del "Corazón" porque es una roca
gigante al centro de una de las cámaras de la segunda caverna y figura a la
cavidad torácica. La otra formación muy interesante es la llamada
"Marimba" que es un conjunto de largas rocas cilíndricas que producen
sonido al golpearlas con la palma de la mano. Recomiendo no golpearlas con
palos porque la piedra se lastima.
Tuve la dicha de conocer este lugar
por casualidad, gracias a que fui invitada, junto al escritor Arbey Rivera y la
escritora Oshy Navarro a hacer una lectura en la escuela Jaime Sabines de la
hermosa comunidad Ojo de Agua en el municipio de Margaritas, con lo que
posteriormente los maestros de la escuela nos llevaron a descubrir las grutas
de Arcotón, que para nosotros fue una increíble sorpresa.
Arbey Rivera, que llevaba en mano su
libro de El callado lenguaje de la piedra,
se sintió en el lugar adecuado para leer su poesía que resonó con el eco de las
grutas:
"...al
entrar en contacto con la primera cueva, cada uno encuentra su propia roca adentro, su estanque mineral, lleno
o vacío".
Lo cual tornó nuestra visita aún más
agradable.
Cómo llegar
Aunque lo más fácil sería llegar en
carro particular, con el que se puede entrar hasta la taquilla de las grutas,
también se puede llegar en transporte público tomando una combi a Las
Margaritas desde Comitán de Domínguez y después otro colectivo que te deje en
la primera entrada de las grutas (a mano izquierda sobre la carretera), desde Las
Margaritas sólo hay combis en las mañanas que nos lleve a las grutas (a las 8 y
9 o a las 2 de la tarde), pero sino, también hay mototaxis que se pueden tomar
desde el ejido El Progreso. Cabe
recalcar que no hay ningún señalamiento, pero la gente del lugar te puede
indicar. Al fin, desde la carretera, tendrás
que caminar una media hora sobre una verde y tranquila reserva natural para
llegar a la entrada de las grutas.
Recomendación:
Preguntar exactamente a qué horas pasan los colectivos de regreso o pedirle al
mototaxi que regrese a buscarte.
El costo por persona es de 10 pesos
entre semana, y 30 pesos los fines de semana. En cualquier caso un guía
acompañará a los visitantes, porque deben mostrarles el camino y cuidar la
integridad del interior de las cavernas de las personas que tienen el mal
habito de rayar y romper las piedras, incluso de llevarlas consigo. Los guías
cambian cada día, como es una zona ejidal no hay un solo encargado.
Un lugar poco turístico
A diferencia de las grutas de Rancho
Nuevo, las grutas de Arcotón son conocidas únicamente por las personas de las
comunidades cercanas a Santa Rosa, poblaciones de gente pacífica que apenas
están empezando a remontar un esfuerzo para dar a conocer este lugar más allá
de la región. Es impresionante que incluso en Comitán poca gente conozca las
grutas de Arcotón.
Qué más hacer en la región
De regreso por Las Margaritas no
dejes de probar sus tradicionales Chinkulguajes, tzejebes y los tamales de
Pitaúl, entre muchos productos más que caracterizan a esta hermosa región de
Chiapas que aún sigue siendo poco turística.
Si te interesa ver más sobre este
lugar te recomiendo visitar mi canal Señora Robot, en el que hice un vídeo
sobre este lugar. Pero mejor aun, visita este lugar y déjate sorprender por los
lugares más insólitos de Chiapas.